Preocupado por despegar a la candidata presidencial Cristina Fernández de los escándalos protagonizados por las funcionarias K (Miceli, Garré y Picolotti), el gobernador bonaerense, Felipe Solá, cometió lo que podría llamarse un exabrupto. “Nadie esta exento de que en su gobierno pasen cosas. No tenemos la plena y absoluta seguridad de que alguien pueda cometer ilícitos o pueda ser corrupto", dijo. Y con esta afirmación, Solá no sólo minimizó la gravedad de un hecho de corrupción, sino que reconoció, implícitamente, que Miceli efectivamente cometió un ilícito.
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) El gobernador bonaerense, Felipe Solá, reconoció hoy -implícitamente- lo que muchos sospechaban, que la ministra de Economía, Felisa Miceli, cometió un acto de corrupción. Y no sólo eso, sino que además el mandatario intentó minimizar la gravedad de un ilícito, naturalizándolo.
Preocupado por despegar a la candidata presidencial por el oficialismo, Cristina Fernández, de los escándalos protagonizados por las funcionarias K (Miceli, Garré y Picolotti), Solá aseguró que “nadie esta exento de que en su gobierno pasen cosas. No tenemos la plena y absoluta seguridad de que alguien pueda cometer ilícitos o pueda ser corrupto". Esta afirmación deja en claro, al menos en el caso de Miceli -de quien el gobernador venía hablando-, que efectivamente hubo corrupción en el Gobierno.
El Ejecutivo bonaerense aseguró que los cuestionamientos contra las funcionarias no impactarán en la candidatura presidencial de la primera dama, y aseguró que “nadie” está exento que ocurran hechos ilícitos en un gobierno. Así se expresó Felipe Solá desde Parque Norte, donde presentó el Foro Internacional de Participación Ciudadana, y agregó que “en el caso de Picolotti, hubo explicaciones de la secretaria que fueron aceptadas y el gobierno pasó a defenderla".
Sin embargo, expresó que con respecto al caso de Miceli, "las explicaciones no fueron suficientes y la justicia hizo que preventivamente el gobierno tuviera que haber tomado una decisión que fue dolorosa; a mí me duele la situación de Miceli”. En este sentido, el mandatario bonaerense defendió la reacción del gobierno nacional, cuyas funcionarias fueron involucradas en sendos hechos eventualmente irregulares. “Nadie esta exento que en su gobierno pasen cosas. No tenemos la plena y absoluta seguridad de que alguien pueda cometer ilícitos o pueda ser corrupto. Lo que se hace es reaccionar, los seres humanos se pueden equivocar, pero hay que reaccionar”, manifestó Solá, quien descartó por este motivo, que estos escándalos repercutan en los índices de intencionalidad de voto de Cristina Fernández.
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