Alberto Fernández sobreactuó en su agresión al periodista Claudio Savoia

Reclamo: Que Alberto F. le pida disculpas a Savoia
Alberto Fernández sobreactuó en su agresión al periodista Claudio Savoia, quien en definitiva no agregó demasiado a algo que ya se sabe: que la protegida de Fernández, Romina Picolotti, no se encuentra cualificada para el cargo y que en su área se han cometido irregularidades.

Alberto Fernández sobreactuó en su defensa de Romina Picolotti, creyendo que el griterío y la acusación contra un periodista que el Grupo Clarín dudó en defender, le permitirían ocultar la realidad: que Picolotti se encuentra en falta. Por su relación tan especial con Grupo Clarín, Fernández sabía que la respuesta del multimedio no sería lo agresivo que se merecía el jefe del Gabinete de Ministros de la Nación. Y para asegurarse esa pasividad, filtró vía el diario Página/12 su posible cargo directivo en Papel Prensa, la sociedad del Estado con Clarín y La Nación. Ayer, por Radio 10, Fernández siguió hablando de una "clara operación política" y una "enorme estafa intelectual"- y al periodista Claudio Savoia lo acusó de haber "copiado una carpeta que circuló en despachos oficiales y entre muchos periodistas". Fernández hizo las declaraciones en una de las radios de Daniel Hadad, con quien mantiene una relación estrecha, y así se aseguró que no habría repreguntas molestas. Fernández aseguró que "los periodistas también deben ser investigados, máxime cuando trabajan en empresas consultoras de grupos económicos a los que ofrecen servicios de prensa". Claudio Savoia le respondió hoy desde Clarín: "No trabajo ni trabajé en ninguna consultora o agencia que preste o haya prestado ningún tipo de asesoramiento u otra clase de servicios a empresas o grupos económicos de ninguna clase. Dialéctica Consultant, el sitio web aludido por Alberto Fernández, es el resultado de un proyecto ideado hace unos años por un grupo de familiares y amigos, que jamás llegó a concretarse. Aunque de la idea participaban profesionales prestigiosos -entre ellos algún conocido del propio jefe de Gabinete- la única huella de aquel proyecto es un sitio de Internet desactualizado". Esto quiere decir que no es verdad que Alberto Fernández estuvo en Google buscando quién es Savoia sino que alguno de quienes lo secundan corrió a contarle por dónde se podía atacar a Savoia para intentar desacreditarlo. Pero la propia Auditoría General de la Nación (AGN) decidió desmentir a Fernández y negó haber avalado la contratación de personal realizada por Romina Picolotti. Fernández, además de difamar a Savoia, había dicho que la AGN había avalado todo lo ejecutado por la heredera de María Julia Alsogaray. En un comunicado de prensa firmado por el Colegio de Auditores, la AGN recordó que su función no es la "coadministrar ni cogestionar" sino que realiza sus tareas "con carácter ex post", es decir que revisa actividades del Estado ya cumplidas. Y, en el caso de Picolotti, la AGN destacó que "a la fecha no se ha aprobado ningún informe" de su gestión, "por lo que mal podría avalar las contrataciones que se han hecho en el organismo durante su actuación". "Hemos cumplido con una requisitoria de la Auditoría General de la Nación", había dicho Fernández el miércoles ante la prensa. Pero la AGN lo negó. Entonces, ¿no debería disculparse Fernández con Savoia? Seguramente no lo hará porque tendría que pedirle la renuncia a Picolotti, pero alguna vez lo funcionarios tendrían que tener alguna nobleza si es que carecen de prudencia y buena fe